La producción ecológica, ¿es nuestra bandera?


Puede serlo perfectamente pero no podemos reducir nuestras acciones únicamente a la Feria de Agosto, FAPEA, con la que por supuesto no podemos estar más de acuerdo.

Si queremos ser abanderadxs en la producción ecológica debemos implicarnos en la dinamización de esa producción desde varios ámbitos.
Estudios recientes confirman que por cada euro que nos gastamos en comida “basura”, la administración se gasta dos en paliar los efectos que esa comida hace sobre nuestro organismo y la destrucción que su producción supone de cara al medio ambiente.
Desde Podemos Llanera proponemos potenciar la producción ecológica en el concejo a través de distintas fórmulas que tendrían una doble dirección; si dinamizamos el consumo de alimentos ecológicos y km. 0, dinamizaremos su producción, con un beneficio incuestionable al ecosistema, a la salud, a la empleabilidad y el emprendimiento y a la zona rural.
Es fácil hablar o escribir, pero hay que ponerse a ello. Cómo lo vamos a hacer?
• La primera de nuestras propuestas es la formación de las personas que quieran emprender. Creemos que la mejor forma de hacerlo es favoreciendo un intercambio de saberes desde distintos estamentos y personas señaladas que atesoran una gran experiencia al respecto. En este sentido jugarán un papel importante distintos colectivos históricamente implicados en la producción ecológica de Llanera.
Esta formación puede hacerse extensible a las personas que quieren trabajar un pequeño huerto para el autoconsumo.
Gestionar los comedores de los colegios del concejo por parte del Ayuntamiento, siempre y cuando las partes implicadas estén de acuerdo. Este sería un importante mercado que habría que abastecer durante todo el año, garantizaríamos una compra a los productores cercanos y el consumo por parte de la comunidad educativa de productos saludables.
• Generar en la Concejalía de Bienestar un nuevo servicio, el reparto de comidas a domicilio a personas de avanzada edad que vivan solas. El objetivo sería proporcionar una dieta nutricionalmente correcta y mantener unos hábitos alimenticios adecuados al estado de salud global de la persona, evitando además, accidentes domésticos ocasionados por la tarea de la preparación de la comida. Sería un valor añadido que, además, un porcentaje elevado de esos alimentos fuesen Km 0 y otro punto a abastecer por parte de los productores locales.
• Dinamizar el consumo de alimentos km 0 por parte de la hostelería del concejo e incluso la venta por parte de las tiendas y supermercados de este tipo de productos, a base de campañas publicitarias y de colaboración con estos ámbitos.


Teniendo en cuenta que Llanera es un concejo abundante en terrenos comunales, pensamos que desde el Ayuntamiento se ha de favorecer la plantación de especies autóctonas, rentabilizando su explotación a través del microrizado para la obtención de setas y la obtención e incluso transformación de frutos secos como castañas y avellanas. Los frutos rojos también son otra posibilidad. En este sentido nuestra propuesta es:


• Impartición de cursos de formación sobre las distintas formas de explotación y rendimiento del bosque autóctono, con el fin de intentar conservar el ecosistema asturiano.
• Generación de una línea de subvenciones destinada a la plantación de especies autóctonas en los terrenos comunales por parte de las personas llevadoras.
• Creación de un programa de plantación de especies autóctonas en terrenos comunales, adaptadas al terreno. Esta actividad es de tipo comunitario, lo que en Asturias se denomina Sextaferia, se trata de hacer de la ecología y la sostenibilidad algo lúdico.


Por otro lado, en otros Ayuntamientos de nuestro entorno se ha aprobado la prohibición del uso de sustancias como el glifosato por parte de las empresas que trabajan para el Ayuntamiento. Vemos la importancia de dar este paso por varias razones, la primera de ellas la salud de la ciudadanía y, por supuesto, la salud de otros elementos que influyen en ella, como las abejas.

• En ese sentido creemos importante hacer cursos y campañas de sensibilización sobre las demoledoras consecuencias del uso de los disruptores endocrinos como el glifosato, tendiendo la mano a otras alternativas más saludables para todos.
• Desde el Ayuntamiento se puede actuar en el ecosistema desde otras maneras, como la inclusión de cláusulas medioambientales en todo tipo de contratos con empresas.